ETAPA 3
REFUGIO SANT JORDI (1.570 m) – REFUGIO DE REBOST (1.640 m)
Distancia: 13 quilómetros
Desnivel positivo: 939 m
Desnivel negativo: 864 m
La verdad es que no lo parece pero sorprende la capacidad de este refugio, 42 plazas, dada la sensación de pequeño que transmite al verlo desde fuera. Y estos se nota por la mañana a la hora de ir a los baños, ya que las colas son bastante largas. Desayunamos, recogemos el picnic y nos vamos. Hoy nos toca subir hasta el Niu de l’Àliga (o eso es lo que creemos). El camino nos lleva por la vertiente sur del Moixeró pasando por una zona de robledos. Bajamos hasta el Clot d’en Pere, que queda en medio de el Roc del Piula y Roca Tallada, y nos dirigimos hacia Gréixer, donde después de cruzar la carretera nos dirigimos cuesta arriba, 500 metros, bordeando los Prats de Millarés hasta llegar al refugio del Rebost, para mí el mejor de todo los refugios de la ruta, no solo porque esté en mano de dos mujeres, que es una parte que se nota bastante, sino por las magníficas vistas que tenemos del Pedraforca, aparte de que por fin vemos el sol después de dos días de nubes. El paisaje nos es increíble y mientras nos comemos el bocata, nos convencemos de que lo mejor es quedarnos allí a dormir. Preguntamos si podemos hacer el cambio, y cabo de poco nos confirman que no hay problema, teniendo en cuenta que perderemos la paga y señal que teníamos en el Niu de l’Àliga y que mañana nos tocará hacer una etapa doble. Y no una de tranquila, ya que seguramente será la más dura de toda la ruta.
ETAPA 4
REFUGIO DE REBOST (1.640 m) – REFUGIO EL SERRAT DE LES ESPOSES (1.511 m)
Distancia: 23 quilómetros
Desnivel positivo: 360 m
Desnivel negativo: 2.326 m
Desde que salimos ya estamos subiendo, y es que hoy tenemos que subir como primera parte de la etapa casi 900 metros. El camino se encarama pasando por el Pla Bagà, el Roc Negre, la Collada de Comafloriu, el Cap del Serrat Gran, el Puig de Comabella, para finalmente llegar al refugio Niu de l’Àliga, donde nos sorprende el simple hecho de que no tienen agua para nosotros, pero si para la gente que sube con el telesilla y van a comer al restaurante. Una vez descansados después de la subida nos tiramos montaña abajo, más que nada que el primer tramo es una pronunciada bajada por una especie de tartera que nos obliga a estar muy atentos de donde ponemos los pies para evitar de no ir a parar abajo antes de tiempo, hasta el Coll de Jou, donde volvemos a remontar hacia arriba. El sendero es de una belleza considerable, vamos cresteando en buena parte y pasamos por el Puig de la Mena, Puig de la Canal Freda, Roca del Llamp, Cap del Pont y les Penyes Altes. A partir de aquí nos espera un desnivel negativo de unos 700 metros. Unas horas más tarde llegamos al refugio de él Serrat de les Esposes y empezamos con el ritual diario, ducha, cerveza y descansar hasta la hora de cenar, donde una vez más nos sacian de comida.